Para que un césped luzca con todo su esplendor es necesario manejar la siega de forma adecuada, siendo esta una de las labores principales en el mantenimiento del mismo. Desde el punto de vista de la planta, la siega, al igual que la poda en especies leñosas, es una acción traumática para el vegetal, restándole reservas alimenticias y aumentando su sensibilidad a distintos factores.
Por este motivo es necesario conocer muy bien todas las variables que intervienen, las cuales nos van indicar cómo y cuando cortar el cesped.
Frecuencia de corte
Depende de la especie en cuestión y de la nutrición de la planta.Las especies de crecimiento rápido requieren mayor frecuencia de siega: Lolium perenne, Festuca arundinacea, y a la inversa. Las especies de crecimiento lento son: Festuca rubra, Agrostis stolonifera, Agrostis alba, Poa pratense, Zoysia japónica, Paspalum vaginatum, Paspalum notatum, Festuca ovina.
Hay ciertos cultivares que aun siendo la especie de crecimiento rápido, el cultivar es de crecimiento lento, por ejemplo Lolium perenne cv. Manhattan
Respecto al abonado, el principal nutriente implicado en este caso, es el nitrógeno. Cuanto más abono nitrogenado se emplee más vigor tendrá el césped y con más frecuencia deberemos segar.
En ningún caso hay que dejar que el césped se espigue y florezca, ya que es un gasto innecesario para la planta, y que va en detrimento del crecimiento, siendo esto último lo que nos interesa. Un césped que no florece ahija más. Recordemos que el ahijado se produce en los meses de otoño e invierno, mientras que los máximos de crecimiento se dan durante la primavera y el verano.
Otro factor a tener en cuenta es que si incorporamos los restos de siega al terreno (mulching), esta tiene que ser más frecuente para que los trozos cortados sean más pequeños (siempre inferiores a 2 cm). De mayor tamaño sería demasiado costoso de descomponer y se formaría una capa de fieltro con consecuencias negativas para nuestro cesped. Con el empleo de una trituradora obviaríamos este punto.
De forma general se debe segar un césped cuando ha crecido 1-3 cm, cosa que depende del momento del año: cada 7-10 días en verano y cada 20 en invierno.
De noviembre a marzo: 1-2 veces por mes
Meses de marzo y octubre: 2 veces por mes
Abril, mayo y septiembre: 3 veces por mes
Junio, julio y agosto: 4 veces por mes
Altura de corte
La regla principal es segar menos del 30% de la altura de la planta, asegurándonos que sea la suficiente como para no perjudicar el desarrollo de los hijuelos. La altura depende del uso que se le vaya a dar al césped: para uso ornamental lo común es dejar la hierba a 4-5 cm y en casos extremos, como son los greens de golf, se corta a 0, 5 cm del suelo.
Muy importante es subir la altura de corte en invierno, de modo que si en verano cortamos un césped ornamental a 30 mm, en invierno lo dejaremos a 40-50 mm. Esto sirve para darle un respiro, dejando que acumule más reservas y para favorecer el ahijamiento, que como ya sabemos, se produce en esa fecha. La altura de la planta es proporcional a la altura de las raíces.
La altura de la planta es proporcional a la altura de las raíces. Si se siega, las raíces se hacen mas cortas, siendo el césped más sensible al arranque, motivo por el cual no conviene segar muy bajo los campos de deportes o zonas de paso con mucho pisoteo.
Maquinaria para la siega
A la hora de hacer cortar el césped existen las siguientes máquinas:
Segadoras
De cuchillas rotatorias: realizan un corte perpendicular al eje de la planta mediante una cuchilla central como si fuese la hélice de un helicóptero. Es un sistema barato y que requiere de escaso mantenimiento, aunque puede rasgar la hoja o levantar el césped. Se emplea en jardines de aficionados ya que siega muy alto.
De cuchillas helicoidales: consiguen un mejor apurado, dando un acabado perfecto, siempre y cuando el césped no esté descuidado. Las hay de 4 a 11 cuchillas. Para jardinería suelen emplearse de 5-7, mientras que para golf, lo más común es que sean de 9-11.
Perfiladoras
También denominadas cortabordes o recortadoras, constan de un hilo de plástico que gira a gran velocidad. Se emplean tanto en horizontal como en vertical, para el acabado de bordes y rincones, zonas junto a arboles, rocallas, aspersores y para el recorte de hierba muy alta.
Como últimas recomendaciones, se debe evitar segar con la hierba mojada, especialmente si se emplea maquinaria eléctrica. Las pasadas han de darse de forma pausada, no hacerlo excesivamente rápido. Después de finalizar el trabajo hay que limpiar la segadora con agua a presión y mojar cuchillas con fungicida. Finalmente, si observamos que el césped presenta problemas del tipo que sea, aplazaremos la siega, dejándolo descansar más tiempo para darle resistencia.
