En este artículo vamos a hablar de cómo aumentar el pH de un suelo ácido mediante el uso de enmiendas calizas o encalado. Para corregir un suelo ácido, debemos entender qué es un suelo ácido, y conocer las causas de la acidez. Un suelo comienza a ser ácido cuando su pH es inferior a 6,5. La acidez hace referencia a la concentración de hidrogeniones (H+) en la solución del suelo, de manera que a más H+, mayor acidez (y menor pH). Cualquier reacción que genere H+, acidificará el suelo. Los suelos muy ácidos dificultan la absorción de ciertos nutrientes, disminuyen el fósforo disponible, solubilizan el aluminio (tóxico para las plantas), y reducen la actividad microbiana.
Principales causas de la acidez en un suelo:
- Suelos muy lavados (Galicia), donde la lluvia arrastra los cationes (K+, Ca2+, Mg2+, etc), a capas inferiores del suelo.
- Abuso de fertilizantes nitrogenados amoniacales, donde, en el proceso de nitrificación, llevado a cabo por las bacterias del suelo, el ión amonio (NH4+) se oxida a nitrato (NO3–). Este es absorbido por la planta, pero también genera un exceso de H+, pudiendo bajar 1-2 puntos de pH en pocos años.
- Presencia de aluminio en suelo (Al 3+), que reacciona con agua, dando lugar a hidróxido de aluminio y más H+.
- Absorción de cationes por la planta, liberando esta H+ y acidificando el suelo.
- Descomposición de la materia orgánica.
Elevar el pH en un suelo ácido hasta alcanzar valores más cercanos a la neutralidad, es una tarea simple y duradera que se lleva a cabo mediante el empleo de enmiendas calizas que neutralizan la acidez, lo que se denomina encalado de suelos.
Enmiendas calizas usadas en agricultura
Óxido de calcio (CaO): Es la cal viva, que aplicada al suelo en presencia de agua, genera una reacción prácticamente instantánea. Contiene un 71% de Calcio (Ca), además de un tamaño de partícula muy fino, siendo la enmienda cálcica que más rápido reacciona. Si no se mezcla rápido con el suelo, se endurece en presencia de humedad.
Hidróxido cálcico (CaOH2): la cal hidratada posee unas características similares a la anterior, pero con un efecto algo menor, al contener un 56% de Ca. Al igual que la cal viva, reacciona rápido pero su efecto es muy corto.
Cal agrícola (caliza): con un coste inferior a las anteriores, es la enmienda más empleada en agricultura. Se compone mayoritariamente de carbonato cálcico (CaCO3) y se obtiene a partir de rocas calcáreas molidas. Con un contenido de un 40% de Ca, tarda más tiempo en hacer efecto, pero este es más duradero en el suelo.
Dolomita [CaMg(CO3)2]: con un 21,6% de Ca, reacciona de forma más lenta que las anteriores enmiendas, pero tiene la ventaja de aportar Magnesio (Mg) al suelo. La dolomita es generalmente menos reactiva que el CaCO3.
Óxido de magnesio (MgO): con un 60% de Mg, es el material de encalado más eficaz a la hora de neutralizar suelos ácidos, reaccionando 2,5 veces más rápido que el carbonato cálcico, aunque tiene la desventaja de ser poco soluble en agua.
Dosis y aplicación del encalado de suelos
Se indica la dosis para caliza (cal agrícola, carbonato cálcico) por ser la enmienda más empleada y duradera.
Cantidad (Kg) de caliza por Ha para elevar 1 punto el pH en los primeros 15cm de suelo.
4,5 a 5,5 | 5,5 a 6,5 | |
Arenoso | 1500 | 2250 |
Franco | 2000 | 3000 |
Arcilloso | 3500 | 4250 |
Modificado de Urbano Terrón, P.; Tratado de fitotecnia general.
La enmienda caliza se aplica sobre el terreno y posteriormente se mezcla mediante laboreo a una profundidad de al menos 15 cm. El suelo tiene que estar húmedo, en caso contrario, no se producirá la reacción necesaria para neutralizar la acidez. Se recomienda no subir más de medio punto de pH por año. La acción de encalado puede durar de 3 a 5 años. Se puede aplicar en combinación con hasta una cuarta parte de yeso en suelos sin problemas de salinidad.
Tras el encalado del suelo no conviene aplicar ningún fertilizante hasta pasado un mes, cuando se usen compuestos de reacción rápida (Óxidos e hidróxidos), 3 meses para carbonatos y hasta 6 meses si se ha encalado con dolomita.
Se recomienda la fertilización mediante de abonos cálcicos: nitrato cálcico, superfosfato de calcio, etc; en lugar de amoniacales: nitrato amónico, sulfato amónico o urea,
Anecdóticamente señalar que el uso de fertilizantes nitrogenados amoniacales en combinación de cal (“para mantener el pH”) carece de sentido, ya que el ion amonio (NH4+) del fertilizante, en presencia de cal, se volatiliza, es decir no llega a la planta. Además, el exceso de nitrato se combina con los cationes del suelo que se pierden por lixiviación (lavado), los cuales, son sustituidos por H+ y Al, y…, y ocurre lo que el lector ya sospecha, la acidifición del suelo.